En Vitónica os vamos a dar algunos consejos para que tengamos en cuenta el por qué de no recurrir a este tipo de anuncios que a la larga nos pueden traer más perjuicios que beneficios. Los medicamentos y los complementos que se usan normalmente cuando queremos obtener una serie de resultados, y es que están suministrados por una persona que entiende de esa materia, y por ello nos indicarán la cantidad y la forma de tomar ese componente. Al comprarlo por Internet el riesgo se multiplica debido a que tenemos acceso a todo tipo de medicamentos y complementos con total libertad sin reparar en los posibles daños que su consumo nos puede traer.
La comodidad de Internet es la principal baza que hace que sea tan atractivo conseguir estos productos por esta vía. Junto a esto el anonimato que supone la compra en Internet es otro de los atractivos de este modo de comprar. El usuario ve fácil acceder a lo que él cree que le conviene, pero lo cierto es que en la mayoría de los casos no sabemos si realmente necesitamos ese medicamento o si el complemento elegido es el mejor para los resultados que andamos buscando. Junto a esto hay que destacar la publicidad que rodea a estos reclamos, y es que en la mayoría de los casos es engañosa, pues describe una serie de efectos irreales que acabamos por creernos y que son los que hacen que accedamos a adquirir ese producto.
El precio suele ser otro de los puntos que solemos tener en cuenta a la hora de adquirir estos productos, pero esa diferencia suele deberse a que estos productos no han pasado los controles pertinentes del país, y por lo tanto no nos aportan ninguna garantía, ni en la formulación y contenido de los mismos, ni en los efectos. En torno a este mundo existen muchas falsificaciones que no tienen ninguna garantía y con las que tenemos que Ser cuidadosos, y es que muchas veces intentar ahorrar en este tipo de productos es un error, ya que lo que esta en juego es muestra salud.