Cada día vemos más ofertas de gimnasios que nos prestan servicios de entrenamiento spress. En la mayoría suelen ser centros deportivos que planifican rutinas de 15 minutos o media hora encaminadas a trabajar todas las partes del cuerpo en conjunto. Mucha gente que no ha practicado nunca deporte se apunta a este tipo de actividades pues las ve como una forma de realizar ejercicio sin que esto les robe mucho tiempo. El problema radica en aquellas personas que o bien por desconocimiento o por confianza consideran este tipo de entrenamiento la única forma de ejercitar su cuerpo con el fin de conseguir un óptimo crecimiento muscular. Nada más lejos de la realidad, y es que debemos saber para qué sirven este tipo de rutinas y qué es lo que más nos conviene.
Los circuitos de entrenamiento rápido están pensados para aquellas personas que no tienen demasiado tiempo para entrenar y que simplemente lo que buscan con el ejercicio es mantener un tono muscular adecuado y evitar el deterioro corporal propio del paso del tiempo. Este tipo de personas no persiguen en ningún caso un crecimiento muscular ni obtener una forma física envidiable.
Este tipo de circuitos incorpora en su mayoría un ejercicio de cada grupo muscular o a lo sumo dos, algo que en realidad es muy escaso si lo que queremos es trabajar intensamente cada parte de nuestro cuerpo. Por esto no es recomendable seguir esta rutina en personas que disponen del tiempo y las ganas para llevar a cabo un entrenamiento completo. Es importante que sepamos que cada parte de nuestro cuerpo necesita ser entrenada concienzudamente y para ello tenemos que dedicarle el tiempo que necesita.
En este tipo de entrenamientos apenas nos queda tiempo para dejar reaccionar al cuerpo, ya que tenemos que saber que es necesario un calentamiento previo para aclimatar los músculos para la actividad que vamos a realizar. En este tipo de rutinas apenas dejamos reaccionar al músculo como debiera, ya que para cuando quiere adaptarse al trabajo se ha terminado la sesión de entrenamiento.
A pesar de ser un entrenamiento rápido el riesgo de lesión está ahí, y sin un calentamiento y una adaptación previa corremos riesgo de lesionarnos al igual que si realizásemos una rutina más prolongada. Lo mismo sucede con la recuperación muscular, y es que apenas dedicamos tiempo a estirar y aliviar al músculo de tensiones que lo pueden perjudicar.
Sí que es cierto que este tipo de entrenamiento es mejor que nada, pero debemos ser conscientes de que mantener esta rutina simplemente nos va a ayudar a tener un tono muscular aceptable, nunca a aumentar la masa muscular, y mucho menos a adquirir una forma física envidiable. Eso sí, las personas que tienden a ser sedentarias por naturaleza o se aburren con el entrenamiento de pesas pueden tener en este tipo de rutinas un aliciente para acudir al gimnasio.
Antes de decidir la rutina a seguir es importante que nos fijemos las metas que queremos conseguir con el entrenamiento, y para ello basta con asesorarnos y saber que el cuerpo necesita tiempo y dedicación para darnos frutos.
Via: vitonica