En artículos anteriores, siempre se habla acerca de la amplitud de la espalda y como lograr aumentarla a través de diferentes ejercicios como por ejemplo las dominadas.
El ejercicio que proponemos hoy aquí también está relacionado con las dominadas, aunque se ejecuta de una manera distinta para atacar la espalda desde otro ángulo.
No siempre se trata de trabajar la parte más expansiva del dorsal. La espalda tiene otras partes que también es importante corregir y trabajar.
Buena prueba de ello son las zonas interiores del dorsal. Son aquellas zonas más pegadas a la columna que tratan de protegerla y por tanto, no se deben descuidar.
Para ello existen las dominadas de agarre estrecho, que, de manera equivocada, muchas personas confunden con las dominadas para bíceps, y poco tienen que ver.
Dominadas de agarre estrecho
Estas dominadas , por lo general, se ejecutan con un agarre en forma de V que también se utiliza para el jalón en banco plano. Se cruza a través de la escalera de dominadas, con el fin de ser cogido por cada uno de sus extremos.
Una vez así dispuesto, la ejecución es exactamente la misma que en las dominadas. Los brazos quedan suspendidos en el aire a fin de realizar el esfuerzo de elevar al resto del cuerpo hacia arriba.
Debemos llegar a una altura donde nuestra barbilla iguale al agarre que pende de la escalera. Y una vez más, la bajada ha de ser retenida.
Músculos involucrados
Al ser un ejercicio libre, no os extrañeis si cogeis congestión en la zona ancha del dorsal e incluso los bíceps. Es característico del movimiento.
Sin embargo, este ejercicio está orientado a trabajar las zonas más “pequeñas” del dorsal o zonas interiores que recorren las espalda y se insertan en la zona lumbar.
Errores más frecuentes
Los errores principales que se pueden cometer al realizar este ejercicio, son precisamente, los errores característicos de los ejercicios de dominadas, es decir ,los arqueos y balanceos del cuerpo.
No se debe culebrear, ni dar respingos con la zona lumbar para elevarnos. Si no podemos lo dejamos. Es mejor eso que conseguir una grave lesión de espalda.
Si este ejercicio es bien ejecutado, es el complemento ideal para el desarrollo de una espalda bien ancha.
El ejercicio que proponemos hoy aquí también está relacionado con las dominadas, aunque se ejecuta de una manera distinta para atacar la espalda desde otro ángulo.
No siempre se trata de trabajar la parte más expansiva del dorsal. La espalda tiene otras partes que también es importante corregir y trabajar.
Buena prueba de ello son las zonas interiores del dorsal. Son aquellas zonas más pegadas a la columna que tratan de protegerla y por tanto, no se deben descuidar.
Para ello existen las dominadas de agarre estrecho, que, de manera equivocada, muchas personas confunden con las dominadas para bíceps, y poco tienen que ver.
Dominadas de agarre estrecho
Estas dominadas , por lo general, se ejecutan con un agarre en forma de V que también se utiliza para el jalón en banco plano. Se cruza a través de la escalera de dominadas, con el fin de ser cogido por cada uno de sus extremos.
Una vez así dispuesto, la ejecución es exactamente la misma que en las dominadas. Los brazos quedan suspendidos en el aire a fin de realizar el esfuerzo de elevar al resto del cuerpo hacia arriba.
Debemos llegar a una altura donde nuestra barbilla iguale al agarre que pende de la escalera. Y una vez más, la bajada ha de ser retenida.
Músculos involucrados
Al ser un ejercicio libre, no os extrañeis si cogeis congestión en la zona ancha del dorsal e incluso los bíceps. Es característico del movimiento.
Sin embargo, este ejercicio está orientado a trabajar las zonas más “pequeñas” del dorsal o zonas interiores que recorren las espalda y se insertan en la zona lumbar.
Errores más frecuentes
Los errores principales que se pueden cometer al realizar este ejercicio, son precisamente, los errores característicos de los ejercicios de dominadas, es decir ,los arqueos y balanceos del cuerpo.
No se debe culebrear, ni dar respingos con la zona lumbar para elevarnos. Si no podemos lo dejamos. Es mejor eso que conseguir una grave lesión de espalda.
Si este ejercicio es bien ejecutado, es el complemento ideal para el desarrollo de una espalda bien ancha.