Constantemente estamos recurriendo a rutinas elaboradas y complejas de entrenamiento cuando realmente la sencillez y lo tradicional suele ser la mejor baza a la hora de ejercitar los diferentes músculos del cuerpo. Esto sucede cuando trabajamos el pectoral, ya que una de las mejores formas es hacerlo es como siempre se ha hecho, realizando las conocidas flexiones.
Este ejercicio no requiere de ningún tipo de peso para realizarse, ya que simplemente nos servirá con el de nuestro propio cuerpo para vencerlo y así estimular a las fibras de los músculos que conforman esta parte del cuerpo, a crecer. Se trata de un ejercicio sencillo que todos podemos llevar a cabo, y que no solamente nos servirá para entrenar el pecho y conseguir desarrollarlo de la mejor manera posible, sino que implica otras partes del cuerpo que también trabajaremos.
No siempre es necesario tirar de mancuernas o de bancos de pesas para desarrollar los pectorales. En este caso simplemente nos servirá con nuestro cuerpo y una superficie donde realizar las flexiones. Se trata de un ejercicio tradicional de todas las tablas de entrenamiento a través del cual, y con nuestro propio peso, entrenaremos el pectoral y conseguiremos que crezca en su totalidad. Pero no solamente el pecho se estará estimulando, sino que los tríceps y los hombros serán otros de los músculos que vamos a ejercitar.
En contra de lo que muchos piensan, las flexiones son un ejercicio que no podemos dejar de lado y que debe estar presente en nuestras rutinas de entrenamiento, ya que lo podemos variar a nuestro antojo para incidir en una zona u otra del pecho y así conseguir los resultados que andamos buscando. Lo mismo sucede cuando queremos trabajar solamente la fuerza o la explosión del músculo o la resistencia del mismo. Simplemente bastará con hacer pequeñas variaciones a las flexiones clásicas.
A la hora de trabajar la parte superior del pecho simplemente tenemos que colocar las piernas sobre algo elevado para incidir más en la parte delantera del pecho. Para trabajar la zona baja debemos colocar las manos elevadas más que los pies. Si queremos aumentar la fuerza del pectoral podemos realizar flexiones asimétricas que consistirían en colocar una mano apoyada en el suelo y la otra sobre un punto elevado. Otra opción es colocar un disco con peso en la espalda para vencer más peso a la hora de elevarnos y aumentar así la resistencia.
Una cosa que no debemos descuidar es la postura, y es que para realizar de forma correcta las flexiones es necesario que nos coloquemos con todo el cuerpo recto y lo mantengamos así a lo largo de todo el ejercicio, pues son los brazos los que deben trabajar únicamente, en ningún caso hay que doblar la espalda o impulsarnos con las piernas, pues el efecto nunca será el que andamos buscando.