Aunque muchos programas y rutinas de ejercicios prometen que se puede estar en forma y delgados con sólo diez minutos diarios, la realidad demuestra que eso es prácticamente imposible. Aún no se ha descubierto un sistema de entrenamiento ni ninguna actividad física o deportiva (como la natación, el ciclismo o la caminata) que dé firmeza y modele todo el cuerpo con diez minutos por día. Para ponerse en forma y mantenerse en forma se debe hacer ejercicio de modo sistemático involucrando los músculos de todas las partes del cuerpo; de esta forma se consigue corregir las posturas incorrectas, reducir la grasa de ciertas zonas y dar firmeza al cuerpo eliminando la flacidez de los músculos. Es inútil creer en las fórmulas mágicas o en soluciones instantáneas; ponerse y mantenerse en forma lleva su tiempo.
Estudios realizados sobre los efectos de la actividad física en el cuerpo han revelado que son necesarios al menos treinta minutos diarios de ejercicios, entre 4 y 5 veces por semana. Sólo así se puede modelar y poner el cuerpo en forma promoviendo una postura correcta. Una vez modelado el cuerpo y perfectamente en forma, sigue siendo necesario entrenar al menos media hora diaria para conservarlo en excelente estado. Lo cierto es que el ejercicio debería formar parte de la rutina diaria de todos. Las personas que siguen regularmente alguna actividad o llevan a cabo una sesión de ejercicios físicos, demuestran un estado fantástico de bienestar general, además de conservar un aspecto corporal espléndido y lleno de vitalidad. Hay que tener en cuenta que el factor “tiempo” tiene una buena compensación, ya que los minutos diarios de ejercicio pueden muy bien alargar el “tiempo” de la vida.
El tiempo de los resultados
En general, si una persona sigue regularmente un programa de ejercicios puede apreciar los primeros resultados al cabo de una semana (siempre que no se aumente la cantidad de comida con el pretexto del ejercicio), y probablemente perciba una leve mejoría después de la primera sesión. En términos globales, ningún programa de ejercicio debería abandonarse antes de los 3 meses (12 semanas), ya que ese período de tiempo es el que realmente asegura cambios visibles en el cuerpo y en la salud. Asimismo, las primeras tres semanas de entrenamiento son claves, ya que el cuerpo se adapta al ejercicio regular y comienza a disfrutar de sus efectos.
Por otro lado, cada individuo reacciona de forma diversa a la actividad física, según la fisiología de su cuerpo. La cantidad de tiempo necesaria para modelar perfectamente el cuerpo en su totalidad, fortalecer los músculos y aumentar su vigor y flexibilidad depende principalmente del estado físico de la persona al empezar un programa de entrenamiento corporal. Si una persona hace ejercicio toda su vida y no percibe cambios en su cuerpo, de seguro que los ejercicios no han sido los adecuados. En este caso, es cuando uno tiene que evaluar seriamente en cambiar de programa de entrenamiento o seguir otra actividad física. Cualquier problema de figura (salvo los causados por una deformación física) pueden corregirse practicando los ejercicios adecuados.
Via: Mariano Salvador Orzola
Estudios realizados sobre los efectos de la actividad física en el cuerpo han revelado que son necesarios al menos treinta minutos diarios de ejercicios, entre 4 y 5 veces por semana. Sólo así se puede modelar y poner el cuerpo en forma promoviendo una postura correcta. Una vez modelado el cuerpo y perfectamente en forma, sigue siendo necesario entrenar al menos media hora diaria para conservarlo en excelente estado. Lo cierto es que el ejercicio debería formar parte de la rutina diaria de todos. Las personas que siguen regularmente alguna actividad o llevan a cabo una sesión de ejercicios físicos, demuestran un estado fantástico de bienestar general, además de conservar un aspecto corporal espléndido y lleno de vitalidad. Hay que tener en cuenta que el factor “tiempo” tiene una buena compensación, ya que los minutos diarios de ejercicio pueden muy bien alargar el “tiempo” de la vida.
El tiempo de los resultados
En general, si una persona sigue regularmente un programa de ejercicios puede apreciar los primeros resultados al cabo de una semana (siempre que no se aumente la cantidad de comida con el pretexto del ejercicio), y probablemente perciba una leve mejoría después de la primera sesión. En términos globales, ningún programa de ejercicio debería abandonarse antes de los 3 meses (12 semanas), ya que ese período de tiempo es el que realmente asegura cambios visibles en el cuerpo y en la salud. Asimismo, las primeras tres semanas de entrenamiento son claves, ya que el cuerpo se adapta al ejercicio regular y comienza a disfrutar de sus efectos.
Por otro lado, cada individuo reacciona de forma diversa a la actividad física, según la fisiología de su cuerpo. La cantidad de tiempo necesaria para modelar perfectamente el cuerpo en su totalidad, fortalecer los músculos y aumentar su vigor y flexibilidad depende principalmente del estado físico de la persona al empezar un programa de entrenamiento corporal. Si una persona hace ejercicio toda su vida y no percibe cambios en su cuerpo, de seguro que los ejercicios no han sido los adecuados. En este caso, es cuando uno tiene que evaluar seriamente en cambiar de programa de entrenamiento o seguir otra actividad física. Cualquier problema de figura (salvo los causados por una deformación física) pueden corregirse practicando los ejercicios adecuados.
Via: Mariano Salvador Orzola