Por: David Flier
Cuando parece que no podemos mejorar en determinados movimientos, debemos considerar la posibilidad de utilizar otros que trabajen la misma musculatura, para luego salir de la meseta. Veamos algunas alternativas de ejercicios.
Luego de muchos meses de entrenamiento siguiendo una rutina monótona de musculación los progresos se hacen cada vez menos evidentes. Es por ello que las variantes de los ejercicios habituales se hacen necesarias.
Con ellos podremos superar la sensación de frustración de no poder aumentar las cargas, y podremos desarrollar nuestra musculatura empleando el ejercicio alternativa. Además, al volver a ejecutar los movimientos habituales habremos ganado fuerza y notaremos la mejora.
Otro aspecto a considerar es la renovada motivación que el cambio puede darnos puesto que muchas veces el agotamiento psicológico hace que no afrontemos las ejecuciones con la máxima concentración.
Una de las alternativas más comunes es cambiar los ejercicios con barras por el mismo movimiento con mancuernas. El press plano, el curl de bíceps o el remo con barra pueden ser cambiados por variantes.
Para ejercicios de aislación del pectoral, el peck deck implica la misma biomecánica que los cruces con cables y las aperturas. En el caso de estas últimas, la tensión no será constante a lo largo de todo el recorrido al no emplearse una polea.
También podemos cambiar los tríceps en polea por la patada de burro o el francés con barra. Estos últimos dos son ejercicios de mayor intensidad.
Cuando trabajamos la espalda podemos reemplazar los jalones en polea por las dominadas, ya que en ambos casos el dorsal ancho es el músculo agonista. No obstante en las dominadas el trabajo de sinergistas será mayor.
Como vemos hay múltiples modos de cambiar ejercicios con el fin de salir de estancamientos en rutinas de musculación. La clave es pensar que parte del cuerpo queremos trabajar y evitar que nuestro trabajo al gimnasio sea idéntica semana a semana.
Via: FitnessOnline.com.ar