Por una razón u otra, mucha gente cree que comer antes de acostarse va a aumentar su acumulación de grasa. Esto puede ser cierto para aquellas personas sedentarias, sin embargo, para todos los aficionados al entrenamiento con pesas, no comer antes de acostarse puede causar pérdida de masa y justamente que la proporción grasa músculo aumente a favor de la primera.
No tengáis miedo de consumir algunas calorías antes de acostaros, porque la proteína y los hidratos de carbono que ingiráis entonces convertirán en realidad vuestros sueños de ganar competiciones, mientras estáis durmiendo.
Para alguien que se ha hecho en un gimnasio donde había muchos campeones culturistas, era fácil recabar información de lo que cada uno de ellos hacía cuando se preparaba para competir. Y una de las cosas que todos tenían en común era que lo último que hacían antes de acostarse era comer. Sin embargo, a pesar de que lo último que hacían cada noche justo antes de meterse en la cama era comer, todos ellos se mostraban el día de la competición con una piel tan fina como el papel y con estriaciones por doquier.
Simplemente porque estéis durmiendo eso no significa que al cuerpo deje de quemar calorías. Vuestro sistema no es como una fábrica dónde todo se apaga durante la noche, bien al contrario, el sueño es una etapa cuando el cuerpo lleva a cabo la mayor parte de la actividad importante. Por ejemplo, trabaja duro para reconstruir todo el músculo erosionado durante el entrenamiento, además de construir nuevos tejidos, para que el cuerpo pueda adaptarse a las intensas sesiones a que es sometido.
Además, miles de otras funciones tales como las realizadas por los sistemas inmune y endocrino se llevan a cabo para mantener el organismo saludable y funcionando correctamente. Así que mientras vosotros estáis dormidos, vuestro cuerpo está muy activo.
La persona media gasta 70 calorías por hora mientras duerme, por consiguiente una noche de sueño de ocho horas requiere 560 calorías. En función de la masa muscular que tengáis, esa cifra puede aumentar considerablemente. Y esas son muchas calorías y si falta la nutrición para proporcionarlas, entonces no pasará mucho tiempo antes de que el cuerpo entre en un estado catabólico y comience a degradar el músculo existente. AH, y si el cuerpo está degradando el músculo existente, entonces no podrá tampoco construir ni una solo molécula nueva de tejido muscular y comenzaréis el día un paso por detrás de dónde lo acabasteis el día anterior. Así no es como se forman los campeones.
Para alguien que se ha hecho en un gimnasio donde había muchos campeones culturistas, era fácil recabar información de lo que cada uno de ellos hacía cuando se preparaba para competir. Y una de las cosas que todos tenían en común era que lo último que hacían antes de acostarse era comer. Sin embargo, a pesar de que lo último que hacían cada noche justo antes de meterse en la cama era comer, todos ellos se mostraban el día de la competición con una piel tan fina como el papel y con estriaciones por doquier.
Simplemente porque estéis durmiendo eso no significa que al cuerpo deje de quemar calorías. Vuestro sistema no es como una fábrica dónde todo se apaga durante la noche, bien al contrario, el sueño es una etapa cuando el cuerpo lleva a cabo la mayor parte de la actividad importante. Por ejemplo, trabaja duro para reconstruir todo el músculo erosionado durante el entrenamiento, además de construir nuevos tejidos, para que el cuerpo pueda adaptarse a las intensas sesiones a que es sometido.
Además, miles de otras funciones tales como las realizadas por los sistemas inmune y endocrino se llevan a cabo para mantener el organismo saludable y funcionando correctamente. Así que mientras vosotros estáis dormidos, vuestro cuerpo está muy activo.
La persona media gasta 70 calorías por hora mientras duerme, por consiguiente una noche de sueño de ocho horas requiere 560 calorías. En función de la masa muscular que tengáis, esa cifra puede aumentar considerablemente. Y esas son muchas calorías y si falta la nutrición para proporcionarlas, entonces no pasará mucho tiempo antes de que el cuerpo entre en un estado catabólico y comience a degradar el músculo existente. AH, y si el cuerpo está degradando el músculo existente, entonces no podrá tampoco construir ni una solo molécula nueva de tejido muscular y comenzaréis el día un paso por detrás de dónde lo acabasteis el día anterior. Así no es como se forman los campeones.