El hombro, es una articulación especialmente móvil y por eso carece de las estructuras óseas de contención que tienen otras articulaciones, como el codo. Por eso son frecuentes las molestias a este nivel. Pero podemos prevenirlas mediante determinados ejercicios.
Las posturas en las que el peso del cuerpo actúe como resistencia en el ejercicio nos facilitarán estos ejercicios isométricos:
- Apoyo de las manos sobre dos superificies sosteniendo el cuerpo (como los atletas de paralelas).
- Los clásicos fondos, pero sin desplazar el cuerpo hasta el suelo. En este ejercicio se ejercitan los músculos estabilizadores de tronco.
- Mantenimiento de flexión de hombros a 90º con poco peso (que se aguante con facilidad).
Estos ejercicios no aumentan la potencia muscular (salvo en el ángulo concreto en que se hacen) pero aumentan la cohesión de la articulación por la acción del deltoides y los rotadores de hombro.