Pauline Nordin es una profesional IFBB en la categoría de figura, su blog (en inglés) fighterdiet incluye sus fotos antes y después, una tienda online y post regulares con útiles consejos, llenos de motivación y con un toque de humor.
¿Cómo distingues el estar hambriento de las ansias por comer? Si tu estómago está lleno ¿cómo explicas el extraño fenómeno de que tu boca quiera comer? Sí, es una locura y uno se pregunta como es posible que el estómago pida más comida cuando lo has llenado ya con la comida correcta. Está todo en la mente, todo en la mente.
He analizado mucho mi propio comportamiento y patrones de pensamiento a lo largo de los años y los tengo bastante controlados:
1. Ver la televisión me da ganas de comer. Ahora sabéis porque soy mala viendo la tele.
2. No darme mi gran festín de vegetales por la noche hace que me ponga increiblemente hambrienta.
3. El no entrenar aún me da más hambre.
¿Cómo resuelvo estos tres puntos? No veo la tv más de lo necesario y cuando me dan ansias de comer me digo en voz alta a mi misma que no es hambre, sólo aburrimiento. Me aseguro de comer grandes cantidades de vegetales. Si me da ansia por comer algo, me pongo a hacer cardio. Tan fácil como eso.
Cuando tengas un golpe de ansiedad, sigue estos simples pasos:
1. Retrasa cualquier posible daño escribiendo que es lo que ansías comer ¿qué esperas conseguir comiéndolo?
2. Ahora, tomaté medio litro de agua y 3 cucharadas de vinagre. Se trata de conseguir un sentimiento amargo.
3. Una vez hagas esto, agarra 400 gramos de zanahorias y cometelos tan rápido como puedas. Sí, ya se que no es lo que quieres comer, pero engañaté diciendo que comerás lo que quieres después de que acabes con las zanahorias.
4. Llama a tu madre por teléfono y deja que te cuente su vida 20 minutos.
5. Ahora mira fotos del físico que quieres y preguntaté a tí mismo si comiendo esa basura te acercarás a tu objetivo o no.
6. Si aún tienes ansias, escribe 10 razones por las que te sentirás mejor si no te comes eso hoy.
7. Ve al espejo y dite 60 veces "Me sentiré mejor sin esto, estas ansias pasarán".
8. Dite a tí mismo que eres un vencedor y los vencedores no se hacen trampa a sí mismos.
9. Toma un batido de proteína. Hazlo con el doble de agua.
10. Finalmente, preguntaté que te diría yo si me enviases un e-mail para decirme que quieres comer basura. Piensa que es lo que te diría.
11. Por último de verdad, preguntaté si te comerías eso si yo estuviese allí contigo.
Via: masfuertequeelhierro.blogspot.com
¿Cómo distingues el estar hambriento de las ansias por comer? Si tu estómago está lleno ¿cómo explicas el extraño fenómeno de que tu boca quiera comer? Sí, es una locura y uno se pregunta como es posible que el estómago pida más comida cuando lo has llenado ya con la comida correcta. Está todo en la mente, todo en la mente.
He analizado mucho mi propio comportamiento y patrones de pensamiento a lo largo de los años y los tengo bastante controlados:
1. Ver la televisión me da ganas de comer. Ahora sabéis porque soy mala viendo la tele.
2. No darme mi gran festín de vegetales por la noche hace que me ponga increiblemente hambrienta.
3. El no entrenar aún me da más hambre.
¿Cómo resuelvo estos tres puntos? No veo la tv más de lo necesario y cuando me dan ansias de comer me digo en voz alta a mi misma que no es hambre, sólo aburrimiento. Me aseguro de comer grandes cantidades de vegetales. Si me da ansia por comer algo, me pongo a hacer cardio. Tan fácil como eso.
Cuando tengas un golpe de ansiedad, sigue estos simples pasos:
1. Retrasa cualquier posible daño escribiendo que es lo que ansías comer ¿qué esperas conseguir comiéndolo?
2. Ahora, tomaté medio litro de agua y 3 cucharadas de vinagre. Se trata de conseguir un sentimiento amargo.
3. Una vez hagas esto, agarra 400 gramos de zanahorias y cometelos tan rápido como puedas. Sí, ya se que no es lo que quieres comer, pero engañaté diciendo que comerás lo que quieres después de que acabes con las zanahorias.
4. Llama a tu madre por teléfono y deja que te cuente su vida 20 minutos.
5. Ahora mira fotos del físico que quieres y preguntaté a tí mismo si comiendo esa basura te acercarás a tu objetivo o no.
6. Si aún tienes ansias, escribe 10 razones por las que te sentirás mejor si no te comes eso hoy.
7. Ve al espejo y dite 60 veces "Me sentiré mejor sin esto, estas ansias pasarán".
8. Dite a tí mismo que eres un vencedor y los vencedores no se hacen trampa a sí mismos.
9. Toma un batido de proteína. Hazlo con el doble de agua.
10. Finalmente, preguntaté que te diría yo si me enviases un e-mail para decirme que quieres comer basura. Piensa que es lo que te diría.
11. Por último de verdad, preguntaté si te comerías eso si yo estuviese allí contigo.
Via: masfuertequeelhierro.blogspot.com