Incluso en nuestros tiempos el desarrollo de espalda de Arnold se cuenta entre los mejores de la historia del culturismo. Sus dorsales anchos y carnosos eran el subproducto de años de dedicada atención. A diferencia de algunos contemporáneos suyos más orientados hacia las máquinas, a Arnold le gustaba confiar en los ejercicios de la vieja escuela para lograr la máxima amplitud. Aunque desde luego no hay mucho que decir en contra de los jalones pesados para el dorsal, el Roble siempre prefirió las dominadas con el peso corporal y usando un agarre muy ancho, que elimina parte de la implicación del bíceps y acentúa la estimulación principalmente en la cara larga y externa del dorsal.
Para ejecutar el ejercicio, empezad por agarraros a la barra de dominadas con las manos lo más separadas posible, aproximadamente con una distancia dos veces superior a la anchura de los hombros. Subid hasta arriba intentando tocar la barra con el pecho. Mantened la barbilla alta y la espalda ligeramente arqueada. Aguantad la posición final durante un segundo y luego descended hasta la posición inicial. Procurad no balancearos durante el movimiento y concentraos en los dorsales tratando de llevar los codos hacia atrás y a la cintura. Como en cualquier otro ejercicio para masa realizad de tres a cinco series de 6-12 repeticiones.
Si las dominadas son muy difíciles para vosotros y no podéis realizar series completas, probad el método que empleó Arnold en sus inicios. Seleccionad simplemente un número de repeticiones totales, digamos 30, y realizad tantas series como sean necesarias hasta completarlas. Cada semana intentad aumentar unas cuentas repeticiones más, hasta que lleguéis a realizar 6-12 repeticiones de una vez. Si podéis ejecutar 12 fácilmente puede que queráis añadir un poco de peso a las dominadas, bien sea mediante un cinturón que permita poner un lastre, o bien sosteniendo una mancuerna entre las piernas.
Para ejecutar el ejercicio, empezad por agarraros a la barra de dominadas con las manos lo más separadas posible, aproximadamente con una distancia dos veces superior a la anchura de los hombros. Subid hasta arriba intentando tocar la barra con el pecho. Mantened la barbilla alta y la espalda ligeramente arqueada. Aguantad la posición final durante un segundo y luego descended hasta la posición inicial. Procurad no balancearos durante el movimiento y concentraos en los dorsales tratando de llevar los codos hacia atrás y a la cintura. Como en cualquier otro ejercicio para masa realizad de tres a cinco series de 6-12 repeticiones.
Si las dominadas son muy difíciles para vosotros y no podéis realizar series completas, probad el método que empleó Arnold en sus inicios. Seleccionad simplemente un número de repeticiones totales, digamos 30, y realizad tantas series como sean necesarias hasta completarlas. Cada semana intentad aumentar unas cuentas repeticiones más, hasta que lleguéis a realizar 6-12 repeticiones de una vez. Si podéis ejecutar 12 fácilmente puede que queráis añadir un poco de peso a las dominadas, bien sea mediante un cinturón que permita poner un lastre, o bien sosteniendo una mancuerna entre las piernas.