La fuerza muscular es imprescindible ya que permite realizar las actividades de la vida cotidiana sin padecer molestias ni riesgo de padecer alguna lesión. La edad y la falta de actividad física reducen la fuerza y también la masa muscular. Por ello es importante optimizarla y mejorarla al máximo.
Cualquier deportista tiene bien en claro que la fuerza muscular es imprescindible en la vida cotidiana. Para lograr mejorar la fuerza muscular existen algunos principios básicos que se deben tener en cuenta:
La resistencia: A medida que se realiza un trabajo muscular en forma progresiva, los músculos se condicionan a resistir un esfuerzo superior al anterior. Este proceso se irá dando de manera gradual de forma tal que los resultados se verán con el tiempo. Pueden utilizarse los aparatos especialmente diseñados para el trabajo de los distintos grupos musculares, de manera tal que podamos realizar un trabajo individual con cada uno de ellos e ir avanzando.
Las repeticiones: Los logros en este tipo de ejercitación se logran a través de las repeticiones. En un comienzo cansa bastante realizarlas e incluso los músculos suelen doler. Sin embargo, a medida que se realicen más repeticiones esta fatiga desaparecerá.
La intensidad: Cuando hablamos de la intensidad debemos tener presente que está relacionada directamente con la fuerza con que se desarrollan los ejercicios. La intensidad también se aumentará de forma gradual y siempre manteniéndola equilibrada con respecto a la resistencia, para no hacer sufrir nuestro cuerpo de manera intensa, ya que esto no trae aparejado ningún beneficio extra.
Cualquier deportista tiene bien en claro que la fuerza muscular es imprescindible en la vida cotidiana. Para lograr mejorar la fuerza muscular existen algunos principios básicos que se deben tener en cuenta:
La resistencia: A medida que se realiza un trabajo muscular en forma progresiva, los músculos se condicionan a resistir un esfuerzo superior al anterior. Este proceso se irá dando de manera gradual de forma tal que los resultados se verán con el tiempo. Pueden utilizarse los aparatos especialmente diseñados para el trabajo de los distintos grupos musculares, de manera tal que podamos realizar un trabajo individual con cada uno de ellos e ir avanzando.
Las repeticiones: Los logros en este tipo de ejercitación se logran a través de las repeticiones. En un comienzo cansa bastante realizarlas e incluso los músculos suelen doler. Sin embargo, a medida que se realicen más repeticiones esta fatiga desaparecerá.
La intensidad: Cuando hablamos de la intensidad debemos tener presente que está relacionada directamente con la fuerza con que se desarrollan los ejercicios. La intensidad también se aumentará de forma gradual y siempre manteniéndola equilibrada con respecto a la resistencia, para no hacer sufrir nuestro cuerpo de manera intensa, ya que esto no trae aparejado ningún beneficio extra.