En el afán de ingerir vitaminas en cantidades necesarias, muchas personas consumen más de lo que deberían. Sepamos por que esto es peligro.
Todos sabemos de la importancia de consumir vitaminas en cantidades adecuadas. Alcanzar la dosis diaria recomendada es fundamental para el correcto funcionamiento del organismo. Sin embargo, esto ha llevado a muchas personas a consumir sin consultas médicas suplementos nutricionales con alto aporte de vitaminas y minerales. Esto no sólo puede ser innecesario, puesto que una alimentación equilibrada nos permite consumir las vitaminas que el cuerpo requiere, si no que puede ser perjudicial.
Nuestro organismo puede sufrir una intoxicación por pasarnos con la cantidad de ciertas vitaminas y minerales. Es cierto que el exceso de algunas vitaminas, como la C, se elimina directamente por la orina. Sin embargo, hay otros casos en los que el mismo puede llevar trastornos.
La vitamina A es muy importante para la vista y los tejidos. No obstante, si se consume más de lo que el cuerpo necesita, se puede provocar osteoporosis, visión borrosa, pérdida de apetito y una disminución de peso significativa.
La vitamina D es otra de las que debemos cuidarnos de no ingerirla en demasía, ya que puede ocasionar una pérdida de energía en los músculos que ocasione gran debilidad, además de vómitos y diarreas. En cambio, si la consumimos en cantidades óptimas, este micronutriente nos permite una correcta absorción del calcio.
También será peligroso pasarse con la vitamina K. Esto podría ocasionar anemias, y en casos más severos problemas hepáticos.
Una alimentación balanceada, con una importante cantidad de frutas y verduras nos ayudará a cubrir los requerimientos diarios de vitaminas. Como muchas cosas en la vida, la alimentación no es amiga de los extremos si no del equilibrio.
Por David Flier para FitnessOnline.com.ar
Todos sabemos de la importancia de consumir vitaminas en cantidades adecuadas. Alcanzar la dosis diaria recomendada es fundamental para el correcto funcionamiento del organismo. Sin embargo, esto ha llevado a muchas personas a consumir sin consultas médicas suplementos nutricionales con alto aporte de vitaminas y minerales. Esto no sólo puede ser innecesario, puesto que una alimentación equilibrada nos permite consumir las vitaminas que el cuerpo requiere, si no que puede ser perjudicial.
Nuestro organismo puede sufrir una intoxicación por pasarnos con la cantidad de ciertas vitaminas y minerales. Es cierto que el exceso de algunas vitaminas, como la C, se elimina directamente por la orina. Sin embargo, hay otros casos en los que el mismo puede llevar trastornos.
La vitamina A es muy importante para la vista y los tejidos. No obstante, si se consume más de lo que el cuerpo necesita, se puede provocar osteoporosis, visión borrosa, pérdida de apetito y una disminución de peso significativa.
La vitamina D es otra de las que debemos cuidarnos de no ingerirla en demasía, ya que puede ocasionar una pérdida de energía en los músculos que ocasione gran debilidad, además de vómitos y diarreas. En cambio, si la consumimos en cantidades óptimas, este micronutriente nos permite una correcta absorción del calcio.
También será peligroso pasarse con la vitamina K. Esto podría ocasionar anemias, y en casos más severos problemas hepáticos.
Una alimentación balanceada, con una importante cantidad de frutas y verduras nos ayudará a cubrir los requerimientos diarios de vitaminas. Como muchas cosas en la vida, la alimentación no es amiga de los extremos si no del equilibrio.
Por David Flier para FitnessOnline.com.ar