La investigación se llevo a cabo en 22.570 mujeres y 20.126 hombres de entre 50 y 64 años y se basó en el análisis del efecto que ejercen de 21 grupos de alimentos y bebidas.
Tuvo una duración de cinco años y fue analizado en tres niveles: consecuencia de la ingesta de energía; el influjo de la energía de los hidratos de carbono, proteínas, grasas y alcohol, y por último la influencia de los azúcares simples y azúcares complejos.
Los resultados fueron muy interesantes, las mujeres que comían carnes rojas, verduras, frutas y lácteos presentaron un menor perímetro de cintura; caso contrario con los hombres quienes demostraron que esta dieta les agregaba centímetros a su contorno.
Por otra parte en las mujeres la ingesta de azúcares refinados, patatas y alimentos dulces generó una cintura de mayores dimensiones, lo que no ocurrió con las que comían azúcares simples procedentes de frutas y verduras.
La cintura más abultada está intrínsecamente relacionada con la dieta baja en frutas y en carne roja, pero rica en alimentos grasos como los snacks, y por otro lado esta forma de comer no sólo suma michelines sino que además hace crecer la barriga.
Via: Consumer