Tumbado boca arriba en el suelo, se estiran los brazos en forma de cruz y haciendo una inspiración profunda se cruza una pierna rígidamente extendida sobre la otra mientras se va espirando. Se vuelve a inspirar y se toma de nuevo la posición inicial. Este ejercicio se repite unas cinco veces con cada pierna y sirve para activar toda la pierna.
Son varios los ejercicios dedicados a reforzar la flexión de las rodillas en particular. Uno de ellos consiste en ponerse de pie, en posición erguida, inspirar profundamente y, sobre los pies juntos y apoyados en el suelo, flexionar las rodillas de modo que se baje verticalmente el cuerpo hasta quedar en cuclillas, mientras se va espirando y levantando los brazos hacia delante para mantener el equilibrio. Este ejercicio debe repetirse entre 10 y 15 veces.
Otro ejercicio requiere separar bien las piernas y, con las manos apoyadas en las rodillas, flexionar estas alternativamente, 5 veces cada una, desplazando el tronco erguido hacia el lado de la pierna flexionada y estirando al máximo la otra.
Un tercer ejercicio para activar las rodillas estriba en ponerse de pie, hacer una profunda inspiración, adelantar ligeramente una pierna con la rodilla levemente flexionada y cargar sobre ella el peso del cuerpo, mientras se va espirando. Este ejercicio se repite 5 veces con cada pierna.
Via: panama-muscle